La tragedia que no cesa. Las muertes de hombres y mujeres en el mar. Hoy, de nuevo, se ha escrito un duro capítulo en las costas limítrofes con Marruecos, en pleno espigón que separa Benzú de Beliones. Allí ha sido encontrado el cuerpo de un joven subsahariano, ahogado, arrastrado por el viento de Poniente. Las fuerzas marroquíes se han hecho cargo de él al quedar tendido sobre su arenal. Lo han tapado con una manta gris mientras pasaban las horas y las horas antes de su retirada. Los vecinos del pueblo fronterizo han sido testigos de lo ocurrido, también inmigrantes que se han acercado hasta el límite de Benzú para ver al compañero muerto desde la distancia.