La fuerza de Emma se hizo ver durante toda la pasada semana pasada. El temporal provocó numerosas incidencias y desperfectos que más allá de poder ser solventados durante una jornada de tregua se han visto nuevamente alterados con la llegada de una nueva borrasca.
Ha sido el caso del quiosco de Benzú donde la fuerza del viento provocó el desprendimiento de la chapa de la parte superior. Con la suerte de no causar daños físicos ni materiales los propietarios han tenido que recurrir al servicio de Bomberos en aras de evitar una desgracia mayor. La dotación ha acudido esta mañana para reforzar el puesto frente a las fuertes rachas de vientos
Dos incidencias más han mantenido ocupadas al SEIS durante la jornada matutina que se ha visto afectada por rachas de hasta 70 kilómetros por hora, así como por lluvia y fenómenos costeros.
La Agencia Estatal de Meteorología mantendrá la alerta amarilla hasta las 5 de la tarde