El patio del Lope de Vega se convirtió en un improvisado campo de entrenamiento de rugby, gracias a una actividad impulsada por el equipo de Hércules Rugby Ceuta que busca fomentar entre los escolares los valores que propugna este deporte.
“Destaca por su disciplina y también por el respeto al rival y, sobre todo, al árbitro, algo que, hoy en día, está un poco en entredicho en otros deportes. Difícilmente se cuestiona una decisión arbitral y sólo el capitán se dirige a él y le habla de manera muy respetuosa dirigiéndose a él como señor”, explica uno de los integrantes del equipo que se encargó de ‘formar’ a estos pequeños jugadores.