La famosa historia que un día trasladó Disney a la gran pantalla ha saltado esta tarde a las tablas del Revellín para entretener a pequeños y mayores a través de un divertido formato de teatro musical. Una clásica historia de amor y triunfo personal impregnada de un estilo musical cercano al pop y unas coreografías que han transportado a los presentes de la elegancia del vals a la expresividad de los bailes más urbanos.