Un año más, los puestos de Navidad han llenado el Paseo de la Marina. Traen a la ciudad todo un mundo de posibilidades para regalar o darse un pequeño capricho. Los clásicos de siempre vuelven a llenar estos stands: bufandas, calcetines térmicos, bolsos, ponchos o juguetes. Todos compiten para formar parte de la lista de Reyes de este año.